jueves, 21 de enero de 2021

Baní y su circunvalación Sur sin Estudio de Impacto Ambiental

Un Estudio de Impacto Ambiental es un documento técnico que se ejecuta con el fin de ponderar los impactos ambientales de un proyecto o actividad sobre el ambiente

Por Patricia Báez Martínez

A este 21 de enero de 2021, pese a que el trazado vial ya está hecho e iniciados los trabajos de construcción, la Circunvalación de Baní (por el Sur), no cuenta con Estudio de Impacto Ambiental (EIA), de acuerdo a recientes averiguaciones que hicimos en el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales. Para el vulgo –incluidas ciertas personalidades que hacen opinión pública-, una avenida o carretera no ameritaría un Estudio de Impacto Ambiental, sin embargo, no es así. De no requerirse un EIA, la carretera de 306 kilómetros en el amazonas boliviano –que afectaría el Parque Nacional Isiboro-Securé y el territorio Tipnis- no hubiese enfrentado tanta oposición en el país andino, al punto de enfrentar al popular ex presidente  Evo Morales con los grupos indígenas que lo habían ascendido al poder años antes.

¿Qué es eso de un Estudio o Evaluación de Impacto Ambiental? Pues no es más que un documento técnico que se ejecuta con el fin de ponderar los impactos ambientales de un proyecto o actividad sobre el ambiente. Generalmente lo contrata el promotor del proyecto, y creemos que esto es un tanto ambiguo, pues el interesado puede manipular los resultados del estudio de modo que primen sus intereses económicos sobre la protección y salvaguarda del medio ambiente.

En el caso de la circunvalación de Baní, pese a que el proyecto original trazaba la vía por la zona Norte del municipio de Baní (proyecto que sí cuenta con Estudio de Impacto Ambiental) y que el propio Presidente Luis Abinader prometió en campaña que ejecutaría ése proyecto original, la obra por la zona Sur con Ecocisa va viento en popa –indetenible-, pese a que esa empresa terminó a cargo del proyecto de una forma bastante cuestionable durante la administración peledeísta. Esperemos que al gobierno del PRM no le explote en la cara la Circunvalación Baní por el Sur, como le explotó el proyecto Marca País, pues ya es experiencia que donde el PLD mete las manos, la corrupción (de la forma que sea) salta como un resorte más temprano que tarde.

En este artículo no expondremos los pro y contra de los dos proyectos de la Circunvalación Baní, porque ya el tema se ha debatido lo suficiente y las diversas opiniones han sido vertidas en diferentes medios de comunicación, ahora se requiere tomar decisiones difíciles, entre ellas, ordenar un Estudio de Impacto Ambiental del proyecto a una entidad que no tenga intereses en él, como podría ser la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) o la Academia Dominicana de Ciencias, o ambas. ¿Por qué este planteamiento? Porque si la adjudicación de la obra a la constructora Ecocisa adolece de falta claridad y legalidad, el informe de Estudio de Impacto Ambiental estará viciado por ese antecedente, aunque sea un estudio correcto en su ejecución y presentación.

En apariencias, el pueblo banilejo está tan desesperado por resolver el problema del tránsito vehicular en el casco urbano del municipio cabecera que ya no le importa si el trazado de la circunvalación se hace por el Norte o por el Sur, es decir, se acoge a la máxima napoleónica: “El fin justifica los medios”. Y si extrapolamos esa flexibilidad en cuanto a la ponderación de las negatividades Vs. positividades de la obra, a la ya hoy en funcionamiento Central Termoeléctrica Punta Catalina (también en territorio de la misma provincia) de la que se ha dicho en los últimos días, entre otras negatividades, que no cuenta con un relleno sanitario; así las cosas, el pueblo peraviano continuará atentando contra su medio ambiente con tal de exhibir obras de infraestructura y disfrutar de una que otra migaja de la que dejan caer los grandes intereses foráneos que están haciendo vida en nuestro territorio.

Proyectos “de desarrollo” atizados por foráneos que inciden en el trazado de la Circunvalación Baní por el Sur

No quisiéramos estar afectados por la xenofobia regional, pero tampoco podemos ignorar o desconocer las influencias de intereses económicos que se están enquistando en la sociedad peraviana, de manera especial en la banileja, imponiendo ellos sus intereses sobre los intereses del colectivo originario, es decir, los intereses reales y sentidos de los que hemos nacido y/o crecido en este valle costero, y quienes hemos realmente padecido y llorado nuestras necesidades.

El turismo

La provincia Peravia fue declarada zona turística en el año 2000, pero su desarrollo como polo turístico ha sido un tema que no ha preocupado ni a sus principales autoridades ni a los sectores económicos, por lo que ese desarrollo del turismo prácticamente no ha llegado aquí. En años recientes, el empresario Frank Rainieri puso sus ojos en Baní -ya que el turismo en el Este -que él desarrolló- es una bomba de tiempo precisamente porque se obviaron todos los procedimientos de protección medio ambiental, construyendo hoteles sobre manglares o a orillas de la playa, provocando la salinización de las aguas subterráneas, así como su contaminación por las aguas negras de esas imponentes instalaciones hoteleras- y el interés de beneficiar su proyecto gravita sobre importantes proyectos de infraestructura, como es el caso de la Circunvalación Baní.

Cuando este grupo de interés se bañaba en dólares y euros en la zona Este del país, los banilejos decidieron en varios Cabildos Abiertos  que el trazado de la tan ansiada Circunvalación Baní se hiciera por el Norte. Pero ha bastado un solo proyecto turístico de envergadura en la zona Sur del municipio, para que el trazado de la importante vía de desahogo se proyecte y casi se esté ejecutando por el Sur, aún sin el Estudio de Impacto Ambiental.

Generación energética

No importó que Peravia sea una zona productora de mangos (entre otras frutas y rubros agrícolas), contamos con el emblemático “mango banilejo”, cuyas plantaciones también se constituyen en un atractivo turístico, para que otra familia foránea, esta vez los Viccini, le ofreciera al gobierno de Danilo Medina los terrenos de Punta Catalina, en el municipio de Nizao, para la construcción de dos plantas a carbón para la generación de energía eléctrica. El negocio es redondo, los terrenos son de la familia, el puerto es de la familia, y allí se desarrollará un parque industrial que los hará más ricos, sin importarles las consecuencias para el medio ambiente de la provincia Peravia, total, ellos no viven en la provincia.

Las nuevas autoridades han denunciado la acumulación de cenizas y aún no se tiene previsto qué hacer con ellas, cenizas que afectan la agricultura, las fuentes acuíferas, la salud humana y animal de la zona. También se ha denunciado la inexistencia de un relleno sanitario en la termoeléctrica. Tal es el caso, que a menos de un año de entrar en funcionamiento, ya sectores políticos que auparon las plantas a carbón, están ahora proponiendo que sean convertidas a gas natural.

La prisa de los gobierno de turno por construir megaproyectos (tras el beneficio político-electoral), aunada a la corrupción, nos ha llevado a este devastador escenario: A exhibir grandes obras de infraestructura la mayoría de las veces con vicios de construcción y lesivas al medio ambiente, contraviniendo ellas las necesidades básicas de la población de alimentación, salud y educación. Pero es lógico y entendible que continuemos en ese supuesto yerro: Un desnutrido, enfermo y sin educación formal y crítica, no tiene fuerzas para exigir a las autoridades que elige e imponerles el sano interés colectivo.

¡Réquiem cantim pace, Baní!


viernes, 13 de noviembre de 2020

Patricia Báez solicita a Comisión de Obras Públicas de la CD abogar porque la circunvalación de Baní se haga por el Norte

 

Bani, provincia Peravia.- La periodista y politóloga banileja Patricia Báez Martínez aprovechó la visita de la Comisión Permanente de Obras Publicas de la Cámara de Diputados a la ciudad de Bani, para solicitarle que sea partidaria de que la circunvalación de esa ciudad sea trazada por la zona Norte, y no por la Sur, como se está haciendo actualmente, contrario a como se estableció en al menos tres Cabildos Abiertos que se realizaron en el Ayuntamiento Municipal de esta localidad.

“Si se construye la Ciudad Universitaria en la zona Norte y la circunvalación se hace por el Sur, eso va a significar que esa importante vía de desahogo vehicular no va a contribuir a que los estudiantes de la región lleguen más rápido y seguros al centro de estudios, así como la ciudad universitaria se verá asediada por la pobreza de la zona. La circunvalación por el Norte, más la Ciudad Universitaria, contribuirían grandemente al desarrollo de esa parte de nuestro municipio”, sostuvo Báez Martínez, en el evento celebrado la mañana de este jueves en el cine-teatro Vaganiona.

La comisión se trasladó a la ciudad de Baní para hacer un descenso en torno a la petición que hace el diputado por Peravia, Luis Baez (PRM), de que sea incluida una partida en el Proyecto de Ley de Presupuesto del año próximo para que la construcción de la ciudad universitaria de la UASD en Baní se inicie en 2021, ya que la UASD opera desde 2012 en este municipio alquilando locales diseminados en el casco urbano, lo que dificulta la docencia y afecta la seguridad de maestros y estudiantes.

Los terrenos para dicha ciudad ya fueron donados por el Ayuntamiento Municipal de Bani y están ubicados en la zona Norte, entre Guazuma, Los Cajuilitos y Los Barracones.

Actualmente también se discute sobre el impacto que tendría la circunvalación por la zona Sur, como ya lo está haciendo la constructora Ecocisa, debido a que en esta parte del municipio se encuentra la mayor proporción de terrenos agrícolas del municipio, además de que el puente sobre el río Baní, sería más largo y costoso por la zona Sur que por la Norte.


Durante la campaña electoral, el Presidente Luis Abinader se comprometió con el liderazgo banilejo a que la circunvalación se trazaría por el Norte, pero el pasado gobierno ya le había arrebatado la obra al Grupo Modesto, que ganó la licitación y tenía contemplado el trazado por el Norte, para traspasarle la obra a la constructora Ecocisa, haciendo ésta el trazado por el Sur, como conviene a los intereses económicos de un empresario turístico.

Otras voces se han levantado en respaldo de que la circunvalación  se construya por la zona Norte, entre ellas se encuentran la del Obispo  de la Diócesis de Baní, Víctor Masalles; la del periodista banilejo Manuel Antonio Guerrero, la del arquitecto y escritor Ismael Díaz Melo, y la del ingeniero e intelectual Fabio Herrera Miniño.

“Si la circunvalación de este pueblo se construye por el Sur, la zona Norte seguirá siendo un gueto de pobreza, que los políticos solo visitan cada cuatro años para buscar votos. ¡Ya está bueno! Que la circunvalación se haga por el Norte”, exclamó la periodista banileja, concitando el aplauso de la mayoría de los asistentes a la reunión con la comisión de diputados, la cual estuvo presidida por los diputados Nidio Encarnación (PRM) y Elías Matos (PRM).

lunes, 9 de noviembre de 2020

Un Gobierno con bastante oposición



Por Patricia Báez Martínez

Contrario a las últimas administraciones peledeístas (2004-2020), la nueva administración del Presidente Luis Abinader Corona empieza su labor en medio de una oposición amplia y feroz, lo que la convierte en una oposición de cuidado. Las razones que diferencian a las administraciones del PLD y la del PRM en relación a la oposición radica en que i) Los conflictos internos en que se vio envuelto el PRD (partido del que nació el PRM) impidieron que su liderazgo se dedicara a analizar y criticar los desaciertos y desafueros de las políticas peledeístas; ii) Las correlaciones de fuerzas políticas no eran favorables para una victoria del PRM sin alianzas, y ello hacía muy escabroso el escenario político (el partido que se ataca hoy podría convertirse en un potencial aliado mañana); y iii) No negaremos que una parte del liderazgo del nuevo PRM pertenece más al sector empresarial que al político, y los políticos piensan en función de intereses económicos. 

Consumado el triunfo del PRM en julio pasado, el escenario político se figura de la siguiente manera:

a)      Un PRM convertido en fuerza política mayoritaria, aunque con gran apoyo de la sociedad civil (ésta última mantiene su espíritu crítico).

b)      Un PLD dividido en: PLD tradicional y Fuerza del Pueblo (dos partidos).

c)      Un PRD destruido y aún en shock, aunque con visos de más resquebrajamiento, y

d)      Una Alianza País al acecho de los errores del presente gobierno para crecer, y perfilarse como opción de gobierno.

Es así como el Gobierno del PRM se ve solo y muy asediado en un sistema de partidos políticos en constante conflicto y transformación, pero sobre todo caracterizado por alianzas imprevistas a causa de la flexibilización de las ideologías. Es evidente que los hermanos gemelos  PLD y Fuerza del Pueblo no le dieron al PRM ni el chance de los primeros 100 días de gobierno para iniciar las críticas, su propósito está claro: No permitir que el Gobierno de Luis Abinader levante cabeza y que la administración del PRM apenas dure 4 años, y nueva vez ellos alzarse con el Poder para seguir esquilmando la Nación, además de protegerse ellos y sus fortunas de eventuales juicios que los pongan tras las rejas.

Este contexto provoca mucha incertidumbre y temor a la hora de la toma de decisiones políticas, y genera una gran presión sobre los gobernantes, lo que debe llevar a las autoridades a ser más precavidas en su accionar, a anticipar las jugadas de la oposición, a ser lo más explicitas posible, pero sin que lo explícito genere más ruido del que conlleva la decisión, es decir, más que relacionistas públicos el gobierno del PRM requiere de verdaderos estrategas políticos en materia de comunicación, algo de lo que nos parece adolece el partido. Pero  si se quiere tener una administración exitosa, debe hacerse acopio de ese tipo de cerebros y hacer un trabajo como la Patria demanda, pues son muchos los que ya compraron su caña de pescar y apuestan a pescar en río revuelto. 

domingo, 23 de agosto de 2020

Municipalista Waldys Taveras responde a regidora Yudith Peguero sobre críticas a la gestión de Santo Ramírez Bethancourt

 


La regidora se queja de que el porcentaje de Gastos de Personal creció en un 3%, pero a la vez pide aumentar el salario de los recolectores de basura. Sin embargo, no ha respondido a la solicitud que hizo el periodista Miguel Antonio Guerrero de que todos los regidores destinen RD$10,000 de sus sueldos para mejorar el salario de esos empleados hasta que se apruebe el próximo presupuesto

Por Patricia Báez Martínez

Santo Domingo, Distrito Nacional.- El municipalista y catedrático Waldys Taveras Daniel, respondió este sábado a las críticas que vertió la regidora del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Yudith Darián Peguero Ortiz, a la gestión del nuevo alcalde de Baní Santo Ramírez Bethancourt, tras la Contraloría General de la República Dominicana (CGRD) emitir un informe en el que se observan leves incongruencias en la ejecución presupuestaria prevista en los acápites A y B de la Ley 176-07 sobre el Distrito Nacional y los Municipios.

La regidora Peguero Ortiz “desconoce el párrafo II del artículo 21 de la ley 176-07 y que en virtud de las disposiciones del artículo 265 de la Constitución, el Estado dominicano està en situación de emergencia, en consecuencia, mientras permanezca esta situación de excepción, los ayuntamientos los ayuntamientos no están obligados a cumplir los acápites A y B de la Ley 176-07”, expuso Taveras Daniel en su red social Facebook.

El artículo 265 de la Constitución versa sobre el Estado de emergencia (uno de los tres estados de excepción que pueden declarse), que solo el Presidente con autorización del Congreso Nacional, puede declarar: “ El Estado de Emergencia podrá declararse cuando ocurran hechos distintos a los previstos en los artículos 263 y 264 que perturben o amenacen perturbar en forma grave e inminente el orden económico, social, medioambiental del país, o que constituyan calamidad pública”.

El párrafo II del artículo 21 de la Ley 176-07 establece que “los porcentajes fijados en los Literales a) y b) de este artículo, no se podrán sobrepasar, salvo casos de emergencia y de desastres”, coo es la pandemia del Covid-19 que está afectando a la República Dominicana y al mundo en sentido general.

El artículo 21 de la ley antes citada define la forma en la que los ayuntamientos deben invertir los ingresos propios y los que reciben por diferentes modalidades establecidas en leyes nacionales, y en sus letras A,  B y C establece la forma porcentual en que deben destinarse:

“A. Hasta el veinticinco por ciento (25%) para gastos de personal, sean estos relativos al personal fijo o bajo contrato temporal.

B. Hasta el treinta y un por ciento (31%), para la realización de actividades y el funcionamiento y mantenimiento ordinario de los servicios municipales de su competencia que prestan a la comunidad.

C. Al menos el cuarenta por ciento (40%), para obras de infraestructura, adquisición, construcción y modificación de inmuebles y adquisición de bienes muebles asociados a esos proyectos, incluyendo gastos de preinversión e inversión para iniciativas de desarrollo económico local y social”.

El informe de la CGRD sobre la ejecución presupuestal del segundo trimestre de este año 2020 en el ayuntamiento de Banì, se da cuenta de que en el acápite Gastos de Personal se ha invertido el 28% de los recursos (3%+); en el acápite Servicios Municipales un 33% (2%+) y 36 %  para Gastos de Capital (4%-).

Se recuerda que el alcalde Santo Ramírez Bethancourt recibió la alcaldía de Baní, el 24 de abril de este año, iniciando la pandemia del Covid-19 y con un déficit presupuestal para este año 2020 de más de 34 millones de pesos dejado por la pasada gestión de la cual la regidora Yudith Darían Peguero Ortiz era relacionista pública y mano derecha del ex alcalde Chacho Landestoy.

El Ministerio de Administración Pública (MAP) se ha opuesto a la cancelación de los empleados de las instituciones públicas, entre ellas los ayuntamientos, por lo que Ramírez Bethancourt ha tenido dificultad para colocar en puestos a quienes trabajaron para su triunfo y a la vez personas de su confianza, teniendo que alternar empleados de la pasada administración con los que puede ir colocando del partido Revolucionario Moderno y su equipo.

Con la crisis generada por el Covid-19, el ayuntamiento ha gastado más recursos para la compra de material de higiene para los empleados del ayuntamiento y sus dependencias (mascarillas, dispensadores de gel, gel desinfectante, alcohol, detectores de temperatura, etc.), así como la higienización del propio ayuntamiento y de dependencias vitales como el mercado municipal, donde cada día se aglomera una gran cantidad de personas en busca de alimentos. Todo esto ha provocado gastos en material de limpieza e higienización y protección, que no estaban contemplados al inicio del año 2020.

Además, el descuido que presentaba el municipio con vertederos improvisados por doquier, ha obligado a las nuevas autoridades a formar cuadrillas para la realización de jornadas de limpieza los fines de semana en zonas afectadas por la basura y la maleza, lo que ha incrementado el gasto de personal, pero a la vez ha ayudado a personas de bajo nivel formativo y escasos recursos, a obtener unos modestos ingresos que les permiten palear la crisis económica que vive República Dominicana en este momento.

A todo este panorama se suma una disminución en las recaudaciones del ayuntamiento por el orden del 60%, debido a la recesión económica que vive el país producto de la pandemia. Para poner un ejemplo, la mayoría de los negocios han solicitado al ayuntamiento el no cobro de las facturas por concepto de Aseo (recogida de basura y limpieza de aceras y contenes) durante los primeros meses de la pandemia debido a que estaban cerrados. Solicitudes que el Departamento de Gestión Tributaria acoge, pese a que los camiones hacían las mismas rutas durante esos meses, gastando recursos en pago de personal, combustible, piezas de camiones, etc., porque el servicio de recogida de basura nunca se suspendió en el municipio.

Las críticas a la regidora en las redes no se hicieron esperar:

Euclides Soto: “Qué es lo que se crees ésta, de lo que ayer fuiste parte del problema, ahora quiere ser la solución”.

Katiuska Medrano: “La verdad es que esta mujer tiene valor, ellos son los culpables de que los trabajadores de ornato y limpieza estén en esa situación y sale ahora a hablar baba, coñ...”

Eugenia Soto: “Lo que no entiendo es: ¿Cómo esa Payasa pudo quedarse ahí, para hoy estar criticando lo que su PL-LADRÓN, NO PUDO HACER EN 20 AÑOS? LA VERDAD QUE TIENES TIMBALES”.

Manuel Lora: “Esa no sabe ni cuál es la misión de una sala capitular”.

Bianka Sano: “Pero y por qué ella no luchó por esos trabajadores para que tuviesen mejores salarios. Ah se me olvidó que ella no era parte del ayuntamiento. Doble moral”.

Cristian González: “Ella es experta en otras cosas”.

miércoles, 22 de julio de 2020

El péndulo (cuento)



Autora: Patricia Báez Martínez



No puedo despertar por completo, este cuerpo, generalmente ágil, no responde a la orden de “muévete”. Los ojos me duelen; la boca del estómago (como si ese órgano fuera otro cuerpo que deglutiera independiente de mí, de mi boca) también la siento irritada. El hedor a alcohol combinado con sudor transforma en repugnante la cama y la mole de mi cuerpo inmóvil sobre ella. Debo despertar, asearme y presentarme al trabajo aunque sea tarde, si no lo hago perderé el empleo. No es un gran empleo, pero es el que tengo. Entreabro los ojos, y aunque el sol me molesta, trato de asirme a él. Desde la cama, alcanzo a ver mi ropa tirada por toda la habitación, es como si llegara ahora mismo a la escenificación de la obra de mi vida y me sorprendiera cada detalle de ella, como si cada uno fuera nuevo para mí y no fiel acompañante de la noche previa. No sé cómo ni cuándo me quité el saco y lo puse sobre la silla ni si me quité los zapatos sentado en la silla o en la cama. El pantalón no lo veo. Ah, lo tengo puesto, no llegué a quitármelo.

La última vez que llegué borracho a la oficina el jefe me dijo que si volvía a achicharrarme así, que mejor no volviera al trabajo y me diera por cancelado. Aunque es una buena forma de obtener mis prestaciones y cambiar de trabajo, no estoy en edad de ser deseado por otras aseguradoras: Tengo que tratar de mantener mi trabajo. Un pequeño impulso y me siento sobre la cama. Mientras, la cabeza hace lo suyo: duele. El sol es ahora un poco más fuerte, quizá han transcurrido unos diez minutos desde que empecé a despertar. ¿Qué hora será? Deben ser como las nueve. Si me animo, quizá llegue a las 11:00 a la oficina. ¿Qué excusa inventaré hoy? Que a mamá le subió la presión otra vez. No, es muy repetitivo. No tengo un hijo pequeño conmigo, de esos que a cada momento se enferman, para decir que tuve que llevarlo al médico de emergencia antes de llegar a la oficina. Ella se fue y se los llevó. Ya se me ocurrirá alguna excusa mientras me afeito o manejo.

El reloj está sobre la mesa de noche, lo tomo entre mis manos y trato de adivinar la hora en medio de la persistente presbicia. Las 9 y 23 de la mañana. Debo darme prisa. Mi imagen proyectada en el espejo es la de otro hombre, muy diferente a mí. Muy diferente al hijo de doña Francia y don Joselo, al joven recién graduado de la foto que cuelga en la sala, al feliz recién casado de la foto que me mira y cuestiona desde la mesita de noche. Tengo que hacer un buen esfuerzo por verme presentable, afeitarme, peinarme, disimular las ojeras, este aspecto de echadía que se la ha pasado tirando asada bajo los inclementes rayos del sol. El agua fría de la ducha intenta borrarlo todo pero no puede; no es cierto que el agua lo limpia todo, como quieren decir algunos. Después de salir de la bañera me sigo sintiendo sucio: ¿Por qué no puedo parar de tomar antes de emborracharme? ¿Por qué tengo que llegar hasta este punto de mi vida en el que todos me abandonan por abominable?

Cubro mi cuerpo con ropa limpia y bien planchada. Me veo perfecto, impecable, pero mi rostro describe la sinuosa ruta de una noche larga de tragos. Mucho perfume, gelatina y enjuague bucal para espantar los malos espíritus del whisky. Ya estoy listo. Recojo el reloj, el celular y las llaves de la casa y del carro. Me dispongo a salir para la oficina. Me sigue doliendo el estómago, pero no tengo tiempo para detenerme a desayunar, tengo que ir directo. ¿Qué le diré al jefe? La pregunta me taladra. Pensándolo bien, una excusa sobre otra excusa, sobre otra excusa, sobre otra excusa… forman una pirámide de inventos en la que el último, su cúspide, no tiene ninguna importancia. Al final, el jefe sabrá que es una excusa más.

Por lo menos a esta hora no hay tapones en las avenidas, el carro fluye igual que mis pensamientos. Me imagino ya en la oficina, llego y el jefe no está, y mi enésima tardanza pasa desapercibida. El mundo es un caos perfecto, esa es la real materia del mundo: El caos ordenado. Yo me embriago, duermo hasta las 9:30 de la mañana, despierto, me preparo y ahora voy al trabajo conduciendo sin stress. De no haberme emborrachado, me habría levantado temprano, hubiese tomado el tapón de las 8:00 de la mañana para llegar a la oficina: quemo gasolina de más y me estreso, solo para complacer a un tipo al que, aunque tiene apellido, le decimos “El jefe” por default, porque sí, porque es parte de nuestro ADN mitocondrial.

Llego a la oficina, estaciono y entro. No puedo evitar sentir miedo, lo siento en la boca, en el estómago y en las tripas: me dan deseos de ir al baño. Sudo con el cuerpo estando frío. Quizá no sea el miedo, tal vez sea el efecto del alcohol, ese maldito cobarde que al día siguiente te empieza a dar puñaladas traperas. El jefe me ve, pero se hace el que me ignora. Saludo y sigo a mi cubículo. Me siento e inspecciono todo, para ubicarme de hasta qué punto llevé el trabajo ayer y dónde debo continuar. Los compañeros me miran, pero tratan también de ignorar la situación, mi tardanza consuetudinaria. Me instalo y comienzo a trabajar. Todo fluye como una caja de bola aceitada, pero el jefe pasa, va hablando con Pablito y se detiene ante mi cubículo y pregunta:

-¿Qué pasó hoy, Fabio?-
-Tenía jaqueca, por eso no pude llegar temprano-
-Es evidente sí que no llegaste temprano. Lo que no es evidente es la causa de la jaqueca-.

Todo parece terminar ahí, pero sé que no, ese hijo de su maldita-mai es como el ron, da puñaladas traperas. En algún momento sentiré su punzada fría en mi espalda, esa que después se transforma en dolor y hemorragia fatal. 

***
Hoy llegué temprano al trabajo, también ayer, anteayer y tras antier. Llevo días sin pegarle la boca a un pico de botella. Trato de no salir, no les tomo las llamadas a los muchachos. Llego del trabajo, me baño y me pongo a leer. Así evito tentaciones. Necesito el trabajo, con ese dinero mantengo a los niños, me mantengo yo y ayudo a mamá ahora que papá ya no está. No puedo darme el lujo de perder el trabajo. Pero no voy a negar que esta es una vida cabrona, que esta maldita sobriedad no es más que otra alienación a un sistema que nos esclaviza y nos prepara mentalmente para ser excelentes obreros, el obrero o no toma alcohol o lo hace muy moderadamente. El dueño de la empresa, no importa; ese se puede beber la fábrica de ron, no ir por un mes a la empresa, e igual la empresa sigue funcionando y dejando beneficios, porque nosotros, los de abajo, la hacemos funcionar, y tenemos prohibido emborracharnos, darnos el placer de distraernos después de una jornada tediosa.

***
Me estoy portando bien, soy un modelo a seguir. Siento que me tratan mejor en el trabajo, con algo de respeto. Magdalena está considerando la posibilidad de que nos reconciliemos. Mamá está feliz porque me he distanciado de los amigos, de esos alcohólicos que solo saben dañar a los demás.  Porque yo estaba bien hasta que volví a encontrarlos y empezamos la juntadera, primero los fines de semana y luego también en la semana. Todo está marchando bien en mi vida, el dinero rinde más, y las cosas se están poniendo en orden, claro, un orden impuesto, no viene de mí, viene de afuera.  Ya no es el caos perfecto; ahora es lo perfecto, pero una perfección desarraigada, sale de la nada. Pero está.

A veces salgo del trabajo y cuando veo un tumulto en un colmadón, siento la necesidad de entrar y pedir algo, aunque sea una cervecita. Y sentarme un rato a ver a las gentes, a las muchachas con sus jeans matemáticos, y a los tipos echando vaina con sus pintas de jevitos Calvin Klein. Pero no debo, todo está caminando bien, las cosas se están enderezando en mi vida y no debo retroceder. Tengo que demostrar que soy un hombre fuerte. Fuerte, sí, fuerte, un hombre fuerte de los que se dejan dominar por las normas.  ¡Qué vaina! Lo único perfecto es el caos, la perfecta armonía de lo diacrónico, de lo desordenado, de lo anárquico, de lo que es por la fuerza de la casualidad y no de la causalidad.  Nada, voy a limpiar la casa, el carro, tengo que tenerlo todo en orden, pronto vuelven Magdalena y los niños.

***
Hoy, cuando salga de la oficina, voy a limpiar el carro, tengo que sacar toda esta basura y ponerlo oloroso. Todo transcurre en calma, normal, como se espera, sin contratiempos. Son las 5:00 p.m. y es hora de salir. Aún tengo un cliente en frente, trato de ser amable, paciente y regalarle una sonrisa a pesar del deseo inmenso que tengo de largarme de este lugar. Estoy nervioso, siento que me tiemblan un poco las manos y la voz. No sé por qué, quizá sea el frío del aire acondicionado. Al fin termino con el cliente y recojo mi escritorio. Me despido de la muchacha que limpia y del guachimán con un hasta mañana. Los demás ya se han ido o no están visibles para mí.

De nuevo el tapón de todos los días en la Churchill con Gustavo Mejía Ricart y en la 27 de Febrero con Privada y en Pintura. Busco en el memory el solo de la flauta árabe de Bashir Abdel Al, y al escuchar las primeras notas inhalo una bocanada de aire que exhalo lentamente con los ojos cerrados: Es el caos perfecto, es la niña vendiendo flores casi tan silvestres como ella misma y el anciano estirando su flaca mano por las ventanillas de los vehículos como una caña de pescar en procura de asir por la boca un pez que debe morir para dar de comer. Me siguen temblando las manos.  ¿Qué será?

Llego a la casa y me pongo en ropa cómoda, sigo escuchando música y me dispongo a limpiar el carro, a sacar basuras que lleva  meses allí, que ya casi era parte del mobiliario del vehículo: cajas de chiclets  y botellitas de agua vacías, facturas del supermercado, alguna que otra semilla de una fruta que para saber cuál era tendría que sembrar la semilla y esperar a que germine, en fin. Entro la mano por debajo del asiento del conductor para sacar más basura, y siento algo duro, frío, cilíndrico. Lo tomo y empiezo a sacarlo, lleva un líquido, lo puedo sentir desplazarse en el cilindro que lo contiene. Ya mi mente presiente lo que es porque lo ha vivido muchas veces. Lo saco y efectivamente: una botella de ron casi enterecita. Un par de tragos mientras limpio el carro no le hacen daño a nadie, y me sirvo. Ya está bueno de música suave, a salseá esta vaina ¡Wepa, qué chulanga! “Uno se cura, yo te juro, amigo mío que uno se cura...”

La noche cae al igual que yo voy cayendo. El mundo no se abstrae de mi (todos me observan), yo, en cambio, me abstraigo del mundo (no los veo). Sigo en tragos y en rumba en “mode alone”, porque el problema es cuando me voy de parranda con esos tígueres del colegio, alcohólicos, degenerados. Si lo hago solo yo me puedo controlar porque no tengo la influencia de ellos, cuando digo “hasta aquí”, es “hasta aquí”, y punto. ¿Yo no soy un hombre? ¡Jú!

Tú ve’ ya yo estoy contentoso, ya yo tengo que ir parando, pero como el verbo se divide en tres sílabas: Pa-ran-do, así mismo lo voy a hacer: A tres caídas, con tres traguitos más a la roca. Que siga la ruuumbaaaaaa, que yo pago, para eso es que trabajo coño, para darme lo que quiero.

***

¡Mierquina! ¿Y qué hora es?

Me lanzo de la cama como un felino en alerta y alcanzo el reloj: 12: 36 p.m. ¡Mierrrrrda! ¿Y ahora? Un suspiro hondo, bien hondo.
Me tiro de nuevo en la cama, encuentro el celular entre las sábanas, busco con cierta dificultad añera  en los contactos hasta que al fin lo encuentro:

-¿Alo?-
-Colmado Juancito. Para servirle-.
-Pana, un litro de Brugal blanco y un jugo de naranja al edificio Acuario, apartamento 202. Devuelta para 1,000.00-.


Mayo de 2018
Baní, prov. Peravia
República Dominicana